El SS "Escanaba Victory"
Singladura
Nr. 25
Recién regreso a New York de otro viaje a Puerto
Cabello-Venezuela, recibo una llamada del gremio de marineros, o sea, la
National Maritime Union, pidiéndome presentarme a las oficinas de U.S.Maritime
Service en el 45 de Broadway, etc. Viejos conocidos allí me reciben y llevan al
39 de Broadway, Officers Room 300.
-Has estudiado y servido lo suficiente para mandarte
a esto como oficial, pero no hay ese cargo disponible hoy. Pero si aceptas ir
de timonel en esta misión puede que te lleves alguna sorpresa... (¿?)...
Allá en Brooklyn, al final, lejos de la vista ajena,
pero en un muelle "especial" estaba cargando un recién construido
barco, el "SS Escanaba Victory."
Cuando me presento al Capitán me dijo enseguida que tenía
ocho oficiales enrolados como simples marineros y quería poder gobernar su
barco en paz y sin celos.
-Me gusta la honestidad. Cuente con mi discreción,
señor; yo vengo de timonel. YA.
Mucho secreteo había allí. Altos funcionarios de
distintas agencias del gobierno iban y venían a diario. La firma del contrato establecía
solamente que el barco estaba "On Articles," con lo cual no tenía el
armador compromiso de mantener tripulante alguno, mientras que “SI”, los tenía
dentro de la ley y a su disposición. Yo iba a dormir a mi apartamento en
Manhattan cada tarde, y regresaba al día siguiente abordo.
Por esos días tenía yo una dominicana que me llevaba
por los cielos. Realmente estaba yo muy enamorado... y bien correspondido, como
diría el guajiro.
Me llamaron a una, dos, tres agencias
"oficiales" pero secretas, y una serie de entrevistas tuve. Nunca
supe, por mil razones, que llevaban tantas cajas, cajitas y cajones, para
tantos puertos de Sud África y otros ocho países africanos a lo largo de los
Océanos Atlántico e Índigo. Tampoco sé porque "los poderes"
enfatizaban tanto que ese barco solamente navegaba en el Pacifico, mientras lo
opuesto era la realidad. Al extremo de que solamente funcionarios del Gobierno
Federal eran quienes se ocupaban de nosotros los tripulantes y del barco. Pese
a que en los documentos hacia aparecer que el barco había sido rentado a la
American South African Shipping Line.
Pronto radio bemba, entre marinos, pese al silencio
de guerra que aun manteníamos, se hacía sentir. Y los comentarios venían de
California y de África.
Mientras tanto un grupo de muchachos de escasa
experiencia marina, producto de la US Maritime Academy, comenzaron a aplastar
monedas de a real (diez centavos), hacerlas mas anchas y enganchárselas a las
orejas, como aretes, dizque, “porque en África los hombres usan aretes”...
Cincuenta años adelantándose a la moda...
Varios días pasaban. Una mañana en que yo no tenia
que trabajar, el Primer Oficial me llama por teléfono y me pide que venga a
verlo a las diez y media de la mañana, me dice que el Capitán quiere saber si
soy miembro del Sindicato de Oficiales, el llamado "Masters, Mates and
Pilots Association," para ofrecerme el cargo de Tercer Oficial. Yo había
servido como tal en grado de guerra por autorización presidencial, pero todavía
no me había graduado de la Academia y esos grados se pierden al terminar la
guerra.
-¡Pero! Me dijo él. La guerra no se ha acabado y todavía
no los han anulado, "y este es un barco en guerra."
-Bueno, si usted lo dice.
Nunca olvidar puedo que yo vestí ese día con un
pantalón gris claro, camisa blanca y un jacket muy ligero mitad blanco y mitad
color miel. La temperatura estaba fresca, no fría.
Cuando llego al barco veo que los estibadores estaban
trabajando a gran velocidad. Amante y penol, todos, a todo andar. La escala
estaba por el lado de babor, desde la misma calle hacia el pañol de proa. La
cubierta estaba muy mojada y de los "winches" corría el aceite a
chorros mezclado con agua y vapor por todas partes. "Trabajamos toda la
noche, hermano", me dijo uno de los marineros de guardia.
En el momento que voy a pasar por el lado de la
bodega número 2, entre amantero, borda, "winche" y engrasador que a
la postre giraba de espaldas para saludarme, comienza el amante a izar y el
penol tira del cable cruzado en la cubierta grasosa, agarra el cable mi pierna
derecha y me lanza por el aire.
Al caer me fracturo la muñeca derecha, y mi pantalón
es una bola de agua, aceite y sangre. Despues de un instante con el cable
enroscado en mi pierna y yo colgado de esa pierna flotando en el aire, las
betas rojas en toda mi ropa eran un despliegue casi de risa...
Juro que, a pesar de los dolores, me tuve que reír. Una,
porque yo soy algo insensible al dolor de la carne, y otra, porque por un
instante me sentí como uno de esos acróbatas de circo volador.
Asustado el winchero arria el cable y con ello me
deja caer la lingada sobre la espalda y me fractura cuatro costillas.
La carga que me cae encima tiene su destino: Una
campana de bronce de 342 libras destinada, me dijeron más tarde, a un campo
minero esclavo en el territorio de los Zulúes Sudafricanos.
No basta eso para reparar mi mano, el ortopédico tuvo
que romperme otro huesito entre mano y muñeca para salvar la situación
"carpal"... y dios bendiga al gordo por haberlo hecho.
Y se debía haber acabado la historia del "SS
Escanaba Victory" para mí en ese momento. Pero no es tan simple la vida, a
veces. Su sombra, su misterio, su curiosa historia me pone junto a ese barco en
New York, en el 1954, cuando recién abría yo mi primer bufete legal... (por cierto,
en la red hay una foto de ese barco atracado entre los de guerra)
Solo que el tiempo, la historia y los vientos ahora
olían a distintos aromas... pero los secretos eran de nuevo su aureola. Y yo,
de nuevo, me veía envuelto con él. De eso mejor no hablar...
Pero mucho tuve que ver con este barco en esa ocasión
y después de que las manos del reloj y las de la historia de los asuntos
gubernamentales y servicios militares hubieran realizado muchas acciones y dado
muchas vueltas.
Hoy es cosa simple ir a la internet y buscar dos
nombres: SS Escanaba Victory y SS Regulus.
Uno y dos, uno mismo, cuerpo y espíritu, labor heroica,
condecoraciones, secretos, destrucción del mío, que fuera construido en 39 días
y del otro, luego de perdido este, que enfrentando enemigos continuamente
durante toda su existencia, es finalmente destruido en Hong Kong por las
fuerzas de un Tifón... Lo que no habían logrado las guerras.
Por ahí anda flotando la historia de su primer
problema, en los tribunales. Cuando el SS Escanaba sale del astillero en el
Estado de Washington, hay un tripulante de apellido Hoines. Por alguna razón
queda fuera el día 15 de enero de 1945 en San Francisco. Hoines no quería venir
a New York, ni navegar por el Cabo de Hornos (lo secreto de la singladura le impedía
al barco pasar por el Canal de Panamá) y Hoines solo quería navegar por sus
mares del Pacifico.
Por alguna razón al día siguiente, 16 de enero de
1945, Hoines vuelve al barco. Una trifulca con uno de los guardiamarinas que
tripulan el barco y "se le escapa" un tiro al guardiamarina y lesiona
a Hoines.
Secretos militares en veremos, líos por falta de pago
por accidente de trabajo bajo las leyes maritimas... Una demanda al Gobierno y
a sus agencias federales por $35,000 dolares, que al final los tribunales le
niegan la demanda...
Ahora bien, los cambios de nombre y de supuestos
propietarios y armadores (?), que siempre ha sido el mismo perro con diferentes
collares "pa'lante y pa'tras", hacen perder en la distancia el rastro
del doblemente misterioso barco ( y su clon), al tiempo que es uno de los casos
que más aventurados y travieso de que se tienen noticias...
Varias guerras, multiples cargas y cambios de
estructura y construcción y hasta base de helicópteros llega a tener abordo
este SS Escanaba Victory, o SS Regulus (AF 57), actual huésped herrumbroso
casco de hierro hecho pasto de la antorcha en la Isla de Kau, en Hong Kong.
Yo no soy muy de fotos, pero hay muchas en la
red...si se las quiere ver.
Gilberto Rodríguez
Miami-Fla..USA
2009-11-29
xxxxxxxx
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