COMPARTIENDO CON LOBOS Y LOBAS DE MAR
Visitar a Miami significa la alegría del encuentro con muchos y el disgusto de unos cuantos, no escapan de esos sentimientos muchos familiares y amigos. Lo cierto es que el tiempo no alcanza para dividirme en pedazos y compartir con cada uno de ellos. Esta vez nació la brillante idea de alquilar un área de picnic en el "Doug Burned Park", creo que se llama así y se encuentra localizado en la 40 y 72 del Sw.
No tenía el teléfono para localizar a todos los marinos que conozco en Miami, tampoco estaba conectado a Internet para avisar a los miembros de Faro de Recalada, aunque participaron tres de ellos. Lo cierto es que muy pronto y con corto tiempo de margen, algunos de aquellos "Viejos Lobos de Mar' corrieron la voz y me regalaron otra de las grandes sorpresas que he recibido en aquella querida ciudad.
Fue una velada inolvidable con seres a los que había dejado de ver en 1973 luego de nuestra graduación en el curso de los "F1" que estudiaron en el "Viet Nam Heroico". Para completar mi alegría esa tarde, asistieron alumnos míos de la promoción XVII de la Academia Naval del Mariel que iré mencionando en las fotografías.
Bueno, entre las presentes se encontraban Noemí Levy y Daysi, viejas amigas a las que logré encontrarse después de muchos años perdidas. Noemí era esposa de uno de mis alumnos, ¿quién no conoció a Sariol en la XVII? Daysi navegó conmigo en el buque Pepito Tey en aquella ocasión donde estuvimos a punto de naufragar, ella tampoco lo ha olvidado. Hablo de dos señoras que fueron las chicas más bellas de nuestra flota en su juventud y aún conservan destellos de aquella belleza.
Creo que la nota más destacada se la debo a Sebastián Rosales, luego de llevar más de una hora conversando con él y a pesar de la familiaridad de su trato conmigo, no me daba cuenta de quién era y lo supe cuando le dijo su nombre a otro de los presentes.
Pedro, alias "Pomo de Leche" entre nuestro grupo de los F1, fue el fantasma de aquel muchacho noble y espigado con su cara siempre sufriendo por el acné juvenil. Si lo hubiera topado en la calle le pasaría al lado sin saludarlo, los años que cargamos han sido implacables. Pomo de Leche fue un caso muy especial entre nosotros, andaba navegando en el cementero Capitán San Luís cuando se varó en un río de Venezuela. Fue acusado de ser agente de la CIA y condenado a prisión, no lo imagino tan jovencito dentro de aquellas cárceles cubanas, nos habíamos visto por última vez en 1973 y el tiempo no alcanzó para recuperar lo perdido.
Domingo Echevarría no cambia, su carácter es el mismo y se burla de la edad, de él y de todos nosotros. Continúa siendo aquel jodedor de nuestros años de estudios, tampoco sabía de él desde aquella fecha.
El Capitán Losada, no el borrachito militar que navegó como Primer Oficial en el Viet Nam Heroico, me refiero al camagüeyano que estudió con nosotros, creo haya sido uno de los que mejor se conserva físicamente. Su carácter agradable y pausado es invariable, el tiempo tampoco me alcanzó para compartir con él. Como no hubo coordinación anticipada y todo fue producto del azar o improvisación, Losada y Avignó habían preparado un encuentro simultáneo al del parque y se vieron obligados a renunciar para asistir al otro.
De la promoción XVII estuvieron presentes el Galo, un gigante al que le echaron abono en los pies y se fue en vicio para arriba, no lo veía desde su graduación en el 78. Estuvo también el Lee con una colección de fotos de un valor histórico increíble, le hablé de las "horas nalgas" que gasto buscando información sobre nuestra flota y quedó en enviarlas para publicarlas en "Faro de Recalada". (Aun las estoy esperando)
Sariol vivió en Montreal, nos vimos desde su llegada a esta ciudad y hace poco decidió radicar en Miami, era junto a Batista el más pequeñito de su grupo. Fue el encargado de citar a varios ex alumnos míos, algunos de los cuales no pudieron asistir por estar trabajando o cumpliendo otros compromisos. Quedó pendiente otro encuentro a mi regreso en Julio y que fuera anunciado para que participaran los miembros del foro.
De nuestra gente asistió Jorge Cancio Padre e hijo, creo hayan disfrutado ese encuentro escuchando las narraciones disparadas por los "Viejos Lobos de Mar". Eduardo Ríos asistió con su hijo Eduardito, el viejo es mi hermano y su hijo mi sobrino desde que era un niño, yo sé que la pasaron bien. El doctor Labrada, mi amigo y hermano desde su aventura marítima a bordo del buque "África-Cuba", fue otro de los asistentes al encuentro y pudo compartir con Daysi y Noemí, tripulantes en aquellos tiempos en la mencionada nave. No puedo dejar de mencionar al Capitán José, lo conocí allí, pero es un frecuente visitante de "Faro de Recalada".
Para concluir, considero que aquel encuentro casi fortuito, ha sido una de las grandes alegrías que me regaló Miami y espero se repita muy pronto.
Desafortunadamente nuestro amigo y hermano Amaya se despidio de nosotros hace un tiempo y se encuentra navegando en el reino de Neptuno.
Un fuerte abrazo..
Esteban
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